Estos deliciosos dulces típicos en cualquiera de las fiestas populares del medio rural abulense, poseen seguramente un origen árabe, habiendo pasado con el tiempo a formar parte de la cultura gastronómica de Ávila. Actualmente representan como ningún otro dulce castellano el valor de lo tradicional, es por eso que Horno el Cristo los elabora de manera totalmente artesanal, manteniendo intacto ese sabor tan típico y tan apreciado por los amantes de lo artesano.
Para su consumo se aconseja mantener los dulces artesanos a temperaturas inferiores a 20 grados.