El obrador "Mariano Hernández" fue fundado en 1950 como panadería por mi abuelo, quien le da el nombre.
En la siguiente generación, desde los inicios hasta finales del siglo XX, dirigieron la empresa mi padre Mariano Hernández y sus hermanas, Mari Carmen y Mercedes. Ellos comenzaron a ampliar la producción con pastas artesanas, mantecados, hornazos, yemas... iniciando así la etapa de pastelería. Desde entonces, esta empresa familiar es bien conocida en Ávila por la calidad de sus productos, su elaboración artesanal y el cercano trato con su clientela. En la actualidad, y como tercera generación, estoy al frente de la empresa, dando continuidad al trabajo y esmero de la familia.